Tradicionalmente, la forma de cerrar
un contrato eléctrico ha sido el de disponer de un precio fijo en todos los
periodos de facturación a lo largo de la duración del mismo. Para ello, las
comercializadoras eléctricas compran en el mercado a futuros la energía
prevista a consumir y le aplican unos gastos de gestión, para de esta manera componer
precios finales. Estos gastos de gestión siempre suelen ser lo suficientemente
elevados para luego no tener ningún problema con su beneficio final.
En los últimos años, se ha empezado
a ofrecer una modalidad de contratación, la cual, para el cálculo del precio
final hay que tener en cuenta el precio del mercado mayorista eléctrico
(conocido como “pool”), al que se le añaden unos gastos operativos que cubren
el beneficio de la operadora (modalidad indexada).
A la vista de estos dos sistemas,
se puede ver que mientras en el primero asume cierto riesgo económico de la
operación la comercializadora (de ahí cobrar unos gastos operativos superiores),
en el segundo caso el riesgo es trasladado por entero al usuario que a partir
de ese momento se encuentra al arbitrio de un mercado irregular, dependiente en
cierto modo de la estacionalidad, la climatología y de las tecnologías que
entren en funcionamiento en cada hora que es lo que al final determinará el
precio correspondiente. Afortunadamente, este precio siempre suele ser menor
que el precio fijo en la mayoría de las ocasiones.
Para minimizar este
riesgo, desde hace algún tiempo en Medhesa estamos acudiendo a la compra, al
igual que las comercializadoras en el caso del precio fijo, en el mercado de
futuros, adquiriendo unos productos financieros que cubran el riesgo de una
posible subida del mercado diario (de ahí el nombre de “cobertura”), asegurándonos
de esta manera en las épocas donde la energía es más cara, precios de energía
algo más económicos.
Con esta modalidad las
combinaciones son más variadas, puesto que se puede elegir no sólo el momento
de la compra en el mercado de futuros, sino que además se puede elegir la
cantidad de energía e incluso el periodo que se quiere adquirir. Además se
puede elegir el comprar la energía de un mismo periodo en varios momentos,
hasta conseguir cerrar el 100% o la cantidad deseada. Cuando se hace una compra
para un momento concreto se habla de hacer un “click”, mientras que cuando si se
hacen una serie de cierres hablamos de la modalidad “multiclick”.
Operando de esta manera
podemos intentar cubrir nuestro precio de la energía en los momentos durante
los cuales tradicionalmente el mercado diario suele deparar precios superiores
como suelen ser los de la segunda parte del año, dejando los primeros seis
meses bien libremente al “pool” o adquiriendo en momentos puntuales una pequeña
cantidad de energía.
Desde Medhesa queremos
hacer hincapié en la importancia de una correcta gestión energética que pasa
por saber, a través de nuestra gestión, cual pueden ser los momentos más
interesantes para acogerse a cualquiera de estas modalidades, viendo sobre todo
cual es el momento más adecuado para la compra de estos futuros.
Para más información sobre
esta publicación o cualquier otra en materia energética, pueden contactar con
nosotros en el teléfono 91 476 65 62, o en nuestro correo electrónico info@medhesa.es.
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